Cuatro matones en Illinois (EE.UU.) no tenían ni idea de con quién estaban jugando cuando decidieron atacar a un repartidor de pizza.
Después de pedir comida a última hora, los cuatro hombres planearon robar la pizza y asaltar a alguien que probablemente suponían que sería un repartidor escuálido y joven, según informó Mad World News.
Pero la suerte no estaba de su lado ese día.
Resultó que todos los repartidores habituales ya se habían ido a casa, por lo que el dueño de la tienda decidió entregar las pizzas él mismo.
Cuando caminaba hacia la puerta, tres de los hombres atacaron al hombre sólo para recibir la sorpresa de sus vidas. En lugar de un repartidor adolescente, se encontraron con un tipo de 1,92 m. y 113 kilos de peso que había sido ex jugador de la NFL (fútbol americano) y que ahora es senador y propietario de la empresa de Pizzas. Se llama Napoleón Harris.
Ellos no eran rivales para este hombre. Pero a pesar de que no fueron capaces de hacer daño a Napoleón, lograron huir con su cartera, pero no por mucho tiempo.
Mientras conducía, Napoleón llamó a la policía y persiguió a los asaltantes hasta un almacén de madera, donde se vieron obligados a huir a pie. En ese momento, sin embargo, los policías ya estaban en camino.
Con la ayuda de Napoleón, la policía logró ponerse al día con tres de los sospechosos y arrestarlos. Actualmente están buscando al cuarto sospechoso, que se cree que se esconde en Indiana.
«No hemos presentado cargos todavía, pero vamos a hacerlo«, dijo el portavoz de la policía Sean Howard.
Sin embargo, ese no es el final de la historia.
Resulta que este robo no fue el único crimen del que estos matones pueden haber sido culpables. Después de que los sospechosos huyeran y dejaran su vehículo abandonado, las autoridades investigaron y se dieron cuenta que había sangre en el coche.
El vehículo fue robado y pertenecía a Lester «Roy» Jones, a quien las autoridades encontraron muerto en Georgia.
Así que Napoleón Harris, senador y ex jugador de fútbol, no sólo ayudó a capturar a unos ladrones, si no que también puede haber ayudado a encontrar a unos asesinos. No está mal para una noche en la que él mismo decidió hacer la entrega de una pizza. ¿No os parece?
