El abandono infantil es un problema grave que, como todas las formas de maltrato infantil, puede tener efectos a largo plazo, incluso después de que termine. Es descorazonador pensar que hay padres por ahí que no proporcionan suficientes alimentos, atención o apoyo emocional a sus propios hijos, pero eso es por desgracia la realidad en algunos casos.
A veces, todo lo que necesita es una persona – o una familia – para ayudar a poner fin a esta negligencia. Así que cuando el policía de Florida (EEUU), Michael Holste, recibió una llamada el 13 de julio de 2005, sobre «una cara pálida y delgada en la ventana de la casa de un vecino», se dio cuenta de que había que hacer algo.
Esta casa había sido habitada desde hacía tres años, pero nadie vio a ningún niño en el patio.
Después de ver la cara en la ventana, un vecino comenzó a sospechar y llamó a la policía. El policía Michael Holste llegó para investigar.
Michael se sorprendió por lo que encontró en el interior: heces de animales por todo el suelo, alimentos pasados masticados, basura, telas de araña, y miles de cucarachas.
Sin embargo, la chica que encontró fue la sorpresa más horrible de todas. Tenía seis años de edad, estaba muerta de hambre, rodeada de basura y tan sólo usaba un viejo y sucio pañal.
«Cuando entré en la habitación, sus ojos se abrieron«, dijo. «Abrió la boca y luego se arrastró hacia un lado, como un cangrejo, hasta una esquina, se puso con las rodillas hasta la barbilla, y envolvió sus brazos alrededor de ellas. Entonces comenzó a hacer gruñidos«.
La niña, cuyo nombre era Danielle, fue llevada inmediatamente a un hospital. Hablaba y se comportaba como una niña de seis meses.
Después de ser enviada a la cárcel por tan sólo 26 horas, a la madre de Danielle la condenaron a dos años de arresto domiciliario y tres años de libertad condicional. La custodia de Danielle le fue quitada inmediatamente.
Unos pocos días antes de cumplir ocho años, en vez de ser enviada a un orfanato, Danielle fue adoptada por Diane y Bernie Lierows, una pareja que ya tenía cuatro hijos. Siempre habían querido una niña, y dijeron que sabían que desde el primer momento en que la vieron que pertenecía a su familia.
Danielle y su familia todavía tienen una gran cantidad de desafíos a los que enfrentarse. Años de abusos han hecho que no se desarrollara adecuadamente, y continúa luchando contra el dolor psicológico de su pasado.
«Tiene siete u ocho ataques al día, y está muy preocupada con la comida«, dice Bernie, su padre adoptivo. «A menudo come hasta que tiene que vomitar.«
Los Lierows cerraron su refrigerador con una cadena, porque de lo contrario podría vaciarlo todo.
Su infancia fue insoportablemente terrible, pero Danielle está mucho mejor ahora con su nueva familia.
Sus nuevos padres esperan que Danielle llegue a alcanzar la independencia, pero por el momento, están satisfechos con los pasos de bebé que ella ha estado dando. «Tener a Dani en nuestra vida es como una montaña rusa. Una montaña de la que no queremos bajarnos«, dijeron.
Recientemente, Oprah se encontró con la familia. Observa cómo cuenta la historia en el siguiente vídeo:
Danielle finalmente encontró esperanza después de un comienzo tan oscuro para su vida. Estamos seguros de que seguirán ocurriéndole cosas buenas.
