Lexi Brown, de 12 años, tiene cáncer, y recientemente pasó un tiempo en el Hospital Infantil Mattel de UCLA en California. La habitación del hospital recibió a una de las casas de fraternidad de UCLA, después de que, para pasar el tiempo y divertirse un poco, Lexi y su madre pusieran un letrero en la ventana pidiendo una entrega de pizza, sin pensar que daría lugar a algo increíble.
Los miembros de la casa Sigma Alpha Epsilon vieron el cartel cuando caminaban por la calle. No sólo llevaron la pizza, también llevaron un ramo de rosas, y una guitarra. Al final llegó un grupo de chicos de veintitantos años, para tocar música para la niña enferma. La mamá de Lexi, Lisa, fue conmovida hasta las lágrimas.
Las sorpresas no terminaron ahí. Lexi trabó amistad con la fraternidad. Los chicos dispusieron todo tipo de visitas interesantes para Lexi, desde el equipo de fútbol de UCLA hasta jugadoras de tenis. Pero la nueva popularidad de Lexi no impidió que los hermanos de fraternidad continuaran apareciendo en su cama de hospital – jugando a las cartas, llevándole peluches, o simplemente sentándose y hablando.
Pero una noche llegó el momento decisivo. Lexi y sus padres se asomaban por la ventana del hospital e hicieron un descubrimiento sorprendente.
Espera hasta ver lo que estos chicos hicieron en su casa de la hermandad para que la viera Lexi al otro lado de la calle …
Lexi Brown, de doce años de edad, tiene un sarcoma y el cáncer se ha propagado a los pulmones. Recientemente fue trasladada al Hospital Infantil Mattel de UCLA en California.
Un día, pasando el tiempo y pensando en algo que hacer, Lexi y su madre pusieron una nota en la ventana del hospital pidiendo un repartidor de pizzas.
La ventana del hospital de Lexi estaba frente a la casa de la fraternidad Sigma Alpha Epsilon en el corredor de la fraternidad de la universidad de UCLA. Cuando los hermanos se enteraron de la deliciosa solicitud de Lexi, decidieron ir con una pizza. También llevaron una docena de rosas rojas y una guitarra.
Durante los siguientes 30 minutos, los hermanos de la fraternidad cantaron una serenata a Lexi mientras yacía en la cama del hospital – y una hermosa amistad comenzó a formarse.
Los hermanos comenzaron a visitar a Lexi de manera regular. Algunas noches, el hospital rompía sus reglas de visita para permitir que se quedasen con Lexi hasta la medianoche. Trajeron regalos, jugaron a juegos, y forjaron una unión increíble.
Cada año, la fraternidad decora la casa de la fraternidad para las fiestas. Este año, los hermanos sorprendieron a Lexi poniendo su nombre con luces en el techo de su casa. Agregaron luces moradas para que coincidieran con su color favorito, y con un parpadeo: su corazón palpitante.
Cuando Lexi miró por la ventana, su corazón se llenó de alegría al ver su nombre con luces.
Lexi ha vuelto a su casa y está luchando en su batalla contra el cáncer, pero los hermanos planean mantener las luces durante toda la temporada de vacaciones.
La fraternidad considera ahora Lexi y a sus padres como parte de su familia. Miembros de la fraternidad de todo el país están donando dinero para ayudar a la familia de Lexi a pagar sus gastos de hospital.
