Más de 1,5 millones de personas han firmado la petición de cerrar el festival de Carne de perro de Yulin, pero esta mujer ha dedicado toda su vida a salvar perros.
Yang Xiaoyun, de 66 años, renunció a su carrera como profesora de literatura y vendió dos casas de su familia para abrir un refugio llamado «La Casa Común para Todos los perros» en Tianjin, al noreste de China. El primer perro que salvó fue un pekinés discapacitado que fue abandonado en 1995 y desde entonces a salvado a incontables perros.
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Con el fin de salvar a los perros de esa inevitable masacre, la señora Yang tiene que comprarlos a los carniceros que ofrecen carne de perro. Estos, cuando la ven venir, suben los precios. El año pasado gastó alrededor de 150.000 yuanes (más de 21.000 euros) en salvar alrededor de 300 perros y varias docenas de gatos, mientras que este año ha salvado alrededor de 500 perros y 100 gatos, por un coste de 300.000 yuanes (unos 42.000 euros).
«Compré los perros a un vendedor que más tarde sujetaba los cuellos de otros perros y los izaba en alto mientras me pedía que comprara más. Cuando regresé al mercado los vendedores me rodearon, burlándose de mí y preguntándome: ¿Cuánto dinero has traído esta vez?» Todos me conocen y suben los precios, porque saben que me gusta comprar perros«. dijo Yang a Mail Online.
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Desafortunadamente, su increíble trabajo tiene un cierto elemento de peligro.
«Ahí fue cuando sentí algo de peligro. He oído que se publican mensajes en WeChat [una aplicación de medios sociales chinos] que decían ‘Matadla’«.
Pero a pesar de los peligros, el coste y el trabajo duro, Yang no tiene absolutamente nada que lamentar.
