Estudiantes con problemas sensoriales están encontrando ayuda de una fuente inesperada: pelotas de tenis.
Amy Maplethorpe, patóloga del habla y el lenguaje en la Escuela Primaria Ellis Raymond en Round Lake, Illinois (EE.UU.), utiliza pegamento para unir las mitades de pelotas de tenis en el respaldo y el asiento de las sillas de la sala sensorial de la escuela. Amy dijo a The Huffington Post que las sillas son útiles para muchos niños que tienen dificultades para regular la percepción sensorial dentro de su cuerpo y de su entorno. Algunos de los diagnósticos de esos estudiantes incluyen autismo, síndrome de Down y trastorno del procesamiento sensorial.
Maplethorpe explicó a HuffPost que las pelotas de tenis ofrecen una textura diferente que las sillas normales.
«Al sentarse en ellas, proporcionan una textura alternativa que mejora la regulación sensorial«, dijo.
Aunque los resultados son diferentes para cada estudiante, Maplethorpe, dijo que tuvo la idea en Pinterest, y que ha visto muchos beneficios para sus estudiantes.
«Los estudiantes de primer grado que han utilizado la silla, se han vuelto más pacientes y han seguido las instrucciones que se les da«, dijo. Maplethorpe también notó una disminución de la inquietud en los estudiantes más jóvenes, mientras esperaban para hacer las pruebas. Sus estudiantes mayores le han dicho que también les gustan las sillas. Uno de los estudiantes con autismo simplemente pasa la mano por las pelotas de tenis. «Esa es otra manera de obtener información sensorial«, dijo Maplethorpe, y otro estudiante disfruta sentado en la silla y escuchando música.
La escuela de Primaria Raymond Ellis publicó una foto de Maplethorpe con las sillas en su página de Facebook el 26 de enero. Desde entonces la publicación se ha hecho viral y se ha compartido más de 91.000 veces. Bet Kiewicz, director de la escuela, dijo a HuffPost que ella está encantada de compartir este asiento alternativo para estudiantes con problemas sensoriales.
