El suicidio del político
El republicano Robert Budd Dwyer era un tesorero de Pensilvania muy querido. El 22 de enero de 1987 convocó una rueda de prensa tan sólo para dispararse en la cara de forma muy dramática delante de medios de comunicación y la televisión estatal.
Esta imagen fue tomada segundos antes de apretar el gatillo.
Los niños secuestrados
Esta misteriosa fotografía fue encontrada el 20 de septiembre de 1989 en el suelo de una tienda de comestibles de Florida. En ella aparecen dos chicos desaparecidos; Michael Henley Jr. de 9 años y Tara Calico, estudiante de 19 años. Fueron vistos por última vez hace 27 años cerca de sus respectivas casas en Nuevo México. Hoy todavía siguen desaparecidos.
El salto de la muerte de los amantes
En el instante en el que se tomaba esta inocente fotografía, la densa contaminación que hay en el puente de Wuham sobre el río Yangtse no permitió que el fotógrafo se percatara de lo que después vió al ver la fotografía con más detenimiento.
Al parecer una pareja de amantes saltó en ese mismo momento, la fotografía recoge el instante preciso en que la mujer cae al vacío (el hombre se había arrojado instantes antes).
Sus cuerpos nunca fueron recuperados.
El dramático final de una foto familiar
Durante el año nuevo de 2011 Reynaldo Dagsa estaba tomando la que debería ser una inocente fotografía familiar cuando ese momento se convirtió en una terrible tragedia.
Unos segundos después de qué él tomara la foto, su asesino Michael Gonzales salió por la izquierda y disparó dos tiros que acabaron con la vida del político delante de su familia.
Los últimos momentos de Regina Kay Walters
Esta ominosa fotografía fue tomada por Robert Ben Rhoades, un conocido asesino en serie. En la fotografía aparece Regina Kay Walter de 14 años de edad, poco antes de que fuera brutalmente asesinada en un remoto granero en Illinois.
Tras su detención Rhoades admitió que le cortó el pelo y la obligó a llevar la ropa de color negro que se ve en la foto.