Algunos de los mejores recuerdos de mi infancia son los más simples. En invierno, recuerdo cuando mi padre me empujaba en un trineo rojo de plástico a través de la nieve. En primavera, recuerdo estar buscando huevos de Pascua por toda la casa. En otoño, por supuesto, cuando saltaba sobre montones enormes de hojas crujientes.
¿Pero y en verano? En verano recuerdo los aspersores del jardín.
¿No recuerdas correr en tu patio o jardín alrededor de un aspersor, saltando a través de miles de gotas de agua? Era tan simple, pero tan divertido. Recuerdo que mis padres vieron lo mucho que mis hermanos y yo estábamos disfrutando de un aspersor de jardín normal.
Este «hazlo tú mismo» de un aspersor con churros de piscina es absolutamente perfecto para cualquier persona, ya sea niño a adulto. La gente que lo hace acaban encantados, y demuestra lo increíblemente fácil que es construir este juguete para nuestro jardín en tan sólo unos pocos pasos, y usando sólo unos pocos materiales simples.