En los últimos años, Keith Anderson decidió hacerse tatuajes en los brazos de los dibujos creados por su hijo Kai para mantener de esta forma un recuerdo de la infancia de su hijo. Cada año, Keith y Kai elijen un dibujo juntos, que se unirá junto a los otros que ya tiene tatuados su padre en los brazos, mostrando así la evolución de su hijo. El último año incluso Kai es el que tatua a su padre. Le encanta.
Esta serie de fotografías han sido realizadas por por Chance Faulkner.
Imágenes por © Chance Faulkner.