En lo profundo de un bosque del norte de Alemania es muy extraño encontrarse con unos tubos que parecen periscopios que sobresalen del suelo. Un día, un grupo de amigos se toparon con ellos en este bosque situado en el antiguo territorio de la República Democrática Alemana. A pesar de que parecía un poco peligroso decidieron explorar la zona. Lo que encontraron oculto bajo el suelo era históricamente interesante… pero también aterrador.
Estos amigos solían jugar allí desde niños, pero nunca exploraron lo que estaba conectado a los tubos.
Así que llegó la hora. La entrada estaba cubierta con una tapa de madera, pero se pudo abrir gracias a una barra de hierro.
Vista desde el interior de la entrada.
Había pasillos interminables, como si se tratara de un hospital…
La acústica del interior del bunker hacía que todo fuera más horripilante.
Había cruces por todas partes. Era tentador no adentrarse en ellos, pero podrían terminar perdiéndose…
El primer callejón sin salida…
Y otro más, el muro había cedido y las paredes estaban llenas de graffitis.
Ahora el camino parecía girar.
Se negaban a dar marchas atrás.
(Aunque a veces era tentador salir de allí)
Puertas que parecían proteger la caja fuerte de un banco parecían arrancadas de sus goznes.
Había pesadas puertas cubiertas con letras difíciles de descifrar.
Señales parecían apuntar a una salida. ¿O no?
¿Unas posibles conexiones con los tubos exteriores?
Los pasillos continuaban hacía abajo y el bunker se hacía más decadente.
Aquí hay una serie de pesadas puertas que alguien tendría que pasar para llegar hasta un destino desconocido…
El texto en alemán decía: «Hola Satanás, te quiero».
Los pasillos olían de forma repugnante por las aguas residuales.
Los niveles inferiores estaban en peor estado…
Algunos pasillos principales y habitaciones estaban inundados.
Y entonces aparece el factor «terror»…
Esta pila de basura en la oscuridad, parecía un hombre sentado y esperando a los amigos…
Otro extraño corredor que era intransitable.
El «gran salón», una de las habitaciones más grandes que descubrieron.
En el centro había una extraña máquina.
Encontraron unos guantes de goma…
Incluso alguien se había dejado un zapato.
Una tarjeta en ruso… ¿Qué diría?
Una escotilla. ¿Pero a dónde conduce?
En la parte superior de una caverna profunda había hielo que colgaba del techo…
Los amigos dejaron el bunker asustados en cuanto su cámara se quedó sin batería. Descubrieron muchas cosas extrañas en las profundidades de la tierra pero no querían perderse. ¿Tú tendrías el valor suficiente para adentrarte en este espeluznante lugar perdido en un bosque y continuar la búsqueda?
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